domingo, 4 de julio de 2010

Hay Quienes

por Jorge Luis Mari Becerra

Intelectual y Poeta Disidente

Invalido por el Gobierno Cubano

Colaborador del Centro Informativo Cubano

 

11 de Mayo del 2010

 

 
HAY QUIENES vegetan moldeados por el medio, como cera fundida en el cuño social donde su moralidad de catecismo y su inteligencia cuadriculada los constriñen a una perpetua disciplina del pensar y de la conducta.  Por eso conspiran y agreden en las sombras, escamoteando vocablos ambiguos, alabando con reticencias ponzoñosas y difamando con afelpada suavidad.  Cuando amenazados por equivocadas jerarquías, por opacos títulos universitarios, o por almidonada improvisación de alcurnias advenedizas, HAY QUIENES acicalan en su espíritu las rutinas y perjuicios que se acorchan en sus presuntuosas creederas.  La MIOPIA MENTAL les impide comprender el equilibrio entre la elegancia y la belleza, la belleza y la armonía, la agilidad y la destreza, la reflexión y la sabiduría.

 

Por eso HAY QUIENES pasan de la verdad a la mentira, de la torpeza a la infamia y de la maledicencia a la calumnia INSENSIBLEMENTE.  HAY QUIENES confunden la tolerancia con la cobardía, la discreción con el servilismo, la complacencia con la indignidad, la simulación con el merito.  HAY QUIENES no distinguen la luz de las sombras como los palurdos que no distinguen el oro del dublé. HAY QUIENES parecen sólidos y se ablandan, ásperos y se suavizan, ariscos y se amansan, calurosos y se entibian, resplandecientes y se opacan, ardientes y se apaciguan, viriles y se afeminan, erguidos y se achatan.  HAY QUIENES llaman cinismo a su ineptitud, decoro a su vanidad, ponderación a su pereza, prudencia a su pusilanimidad, fe a su fanatismo, ecuanimidad a su impotencia, distracción a sus vicios, liberalidad a su briba sazón a su marchitez.

 

En fin HAY QUIENES se mancornan en grupos, se arrebañan en organizaciones, se suman en partidos y de esa forma, el letrado es igualado al analfabeto, el rebelde al lacayo y el poeta al prestamista.  HAY QUIENES son audaces en la traición y tímidos en la lealtad.  Así como: HAY QUIENES tienen la cabeza como un simple adorno del cuerpo.


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